Esta receta ya hace tiempo que la tenía publicada en
el blog, pero en esta ocasión voy a compartir la receta paso a paso de la plancha
de bizcocho que usamos para el brazo de gitano.
Solo necesitamos 3 ingredientes (revisad
que todos sean sin gluten ni trazas):
- - 5 huevos a temperatura ambiente
- - 5 cucharadas soperas de azúcar o su
equivalente en edulcorante (yo he utilizado la sucralosa marca Eroski, que
resiste la cocción en el horno sin alterar su sabor; y se sustituye una cucharada
de azúcar por una cucharada de edulcorante)
- - 5 cucharadas soperas de harina sin gluten:
mezclamos 3 cucharadas soperas de harina de arroz + 2 de almidón de maíz
(tipo maizena)
Preparación:
En caso de que el relleno requiera una preparación en
caliente, os recomiendo que los preparéis con antelación para que enfríe. Yo usé
la receta de crema pastelera que ya tenéis publicada AQUÍ.
Precalentamos el horno a 180º, calor por
arriba y por abajo.
Cogemos los huevos y separamos las yemas
de las claras.
Mezclamos las yemas con el azúcar/edulcorante,
y las batimos hasta que blanqueen (quedan muy espumosas, como en la foto):
En otro recipiente, batimos las claras a
punto de nieve firme.
Incorporamos las claras montadas a las
yemas con cuidado, para que no se bajen (en dos o tres veces).
Tamizamos la harina y la añadimos poco a
poco a la masa (con movimientos envolventes).
Preparamos la bandeja del horno forrándola con papel de hornear (humedecer un poco la bandeja para que al poner el papel no se mueva). Vertemos la masa y la distribuimos uniformemente con ayuda de una espátula.
Hornear a 180º unos 10-15 minutos
aproximadamente. Sacarla del horno en cuanto coja color.
Enrollamos con cuidado el bizcocho sin
sacarlo del papel, para que coja la forma, tal y como veis en las fotografías.
Envolvemos el bizcocho en un paño húmedo, hasta que enfríe.
Una vez que enfríe, lo despegamos con
cuidado del papel:
Igualamos los bordes del bizcocho,
cortándolos con un cuchillo:
Rellenamos con la crema pastelera (o el
relleno que hayáis elegido), sin llegar a los bordes.
Volvemos a enroscar el bizcocho con
cuidado, pero apretando. Y dejamos la parte que cierra (la que veis en la
foto), apoyada en la bandeja donde vayamos a servir.
Después de unas horas en la nevera, lo decoramos
a nuestro gusto. En mi caso con nata montada y decorada con fideos de
chocolate.
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